La alta incidencia de traumatismos faciales va de la mano del progreso tecnológico. A medida que pasa el tiempo, las velocidades de autos y motos aumentan y la imprudencia de los conductores se hace más frecuente. Estos hechos llevan a la gran cantidad de lesiones producidas por traumatismos.

Dos tercios se los accidentados presentan heridas en la cara y estadísticamente hablando, la cabeza se encuentra afectada en un 80% en choque vehiculares.